Estamos en el año 1982 y una Norte América convulsa lleva a
la creación de este cómic, que sigue vigente a día de hoy, 37 años después de
su aparición en La Casa de las Ideas.
La sociedad en estos años ha avanzado y evolucionado
llegando a construir un mundo globalizado, pero por muchos años que pasen las
ideas nunca mueren, desde las más honorables hasta las más extremistas. Los
individuos van pasando por el mundo pero las ideas quedan incrustadas como una
huella en la historia de la humanidad, a veces, como delicadas y suaves
inscripciones, otras, como crueles y bárbaras atrocidades. El ser humano ha ido
pasando por etapas de bonanza y otras horrorosas e innombrables, sucediéndose
unas a otras.
En el año 1982 el racismo, la discriminación hacia las
personas que pensaban de forma diferente a lo que estaba estipulado en Biblias
y “leyes” que ensalzaban la moralidad por encima de todo y el rechazo a los
parias, que esas mismas “leyes” decían amparar, estaban a la orden del día. La
sociedad actual sigue en cierta medida igual que en aquel año, pero en muchos
aspectos está consiguiendo abrir fronteras, aunque haya quien se empeñe en
cerrarlas.
Estas son solamente algunas de las ideas que ponen en marcha el motor de esta novela gráfica de La Patrulla-X. Una vez analizado el contexto de su creación, entenderemos mejor su fondo.
Este cómic no se creó con la idea de enfrentar a La
Patrulla- X contra un supervillano, sino contra cómo se percibía la sociedad en
ese momento de la realidad americana. Claremont y Brent podrían haber elegido
un supervillano clásico para poner en marcha la obra, como Magneto (el cual
también aparece en la novela pero de forma más amistosa de lo habitual),
Galactus… enemigos de entidad. Pero en 1982 los enemigos eran los
telepredicadores y los “Dioses terrenales” que alimentaban el cerebro de las
personas con ideas extremistas y radicales. “O estás conmigo o estás contra mí”
es una frase acorde para esta novela, pues el villano es un reverendo llamado
Stryker, líder de la “Cruzada Evangélica Mundial”, el cual evangeliza que la
Patrulla- X y cualquier otro mutante del mundo, por el hecho de ser mutante,
está en contra de la fe y por tanto de Dios.
Los mutantes son el Diablo y hay que extirparlos de la
sociedad, erradicarlos, acabar con todos y cada uno de ellos. Este es el punto
de vista del villano de la obra.
La historia también refleja la presión que había por parte
de las “Altas Esferas” hacia todo aquel cambio, todo aquello extraño o
desconocido, donde solamente había lugar para la fe, dándose la paradoja de que
la fe en la que se cimentaba la sociedad estaba sustentada por lo intangible y
por aquello que trascendía al ser humano, es decir, aquello que es extraño y
desconocido. Los mutantes representaban ese papel demonizado, pero además
sembraba en el reverendo Stryker una segunda paradoja. El vivió en primera
persona lo que significa ser mutante, pues según podemos ver en el cómic, tuvo
un hijo mutante al cual el mismo ajustició, por tanto ¿No es más demonio
alguien que asesina a un recién nacido que alguien que sufre una mutación sin
voluntad propia? A lo que se añade una tercera paradoja, ¿Puede ser la mutación
obra divina y al oponerse el reverendo Stryker a todo lo mutante oponerse a
Dios?
¿Y cómo atacar a alguien sin superpoderes ni superfuerza,
sino que hace campaña con la palabra, taladrando mentes? Pues con la palabra y
siendo ejemplo con las acciones. Cada uno de los miembros de la Patrulla- X
tiene un hueco en la historia no sólo por ser mutantes, sino porque algunos de
ellos son judíos, otros son extranjeros, otros tienen diferente color de piel…
Todos ellos forman un tándem que demuestra que a las palabras radicales se las
gana con hechos y con propósitos, ante los cuales esas palabras no pueden
sostenerse y caen por su propio peso.
Como estáis viendo este no es un cómic al uso, es un reflejo
de lo más oscuro de la sociedad. Os recomiendo su lectura, es interesantísimo
el punto de vista de Claremont sobre la forma de vida a principios de la década
de los 80 a través de los ojos de La Patrulla- X.
“Dios ama, el hombre mata” fue publicado por la editorial
MARVEL en el año 1982 y en Agosto de 2018 Panini Cómics nos trajo esta
magnífica reedición en tapa dura y con contenidos extra.
Número de páginas: 96.
Precio: 18€.
Valoración: 9.
Por: David Cercas.




